Josep Luis Sert
Nacido en Barcelona en 1902 en el seno. de una familia de la burguesía catalana. Desde pequeño ya muestra interés por Gaudi, su tío encarga la construcción de la pedrera a este, su otro tío es el pintor Josep Maria Sert que vivía en una casa lindante con la Pedrera que posteriormente fue la ya tristemente desaparecida tienda de interiorismo Vinson, aunque allí ahora mismo podemos admirar una de las magnificas tiendas que Inditex esta realizando por todo el mundo. Se licencio en arquitectura en la universidad de Barcelona, en 1926 viaja a Paris donde conoce a Le Corbusier y al año siguiente empieza trabajar en su estudio.
En 1930 comienza a construir sus primeros edificios, blancos con ausencia de ornamentos y con esa transmisión de La Luz tan mediterránea , de está manera Sert realiza los primeros edificios racionalistas en España. Esta época corresponde el sanatorio de tuberculosos.
Fue miembro del GATEPAC asociación de arquitectos con intención de ser la rama española de los CIAM (de los que acabo siendo presidente después de Le Corbusier)
Realiza el pabellón de la republica en Paris en 1937, por lo que tiene que exiliarse en EEUU al terminar la guerra. Al llegar allí funda un estudio con otros arquitectos. En 1953 es nombrado decano de la universidad de Harvard, aunque sigue trabajando fuera de esta.
Muy interesado desde siempre por el arte, mantiene una relación fluida con multitud de artistas como Joan Miro, Picaso ...
En 1982 recibe en España la medalla de las bellas artes pero aquí no se le empieza a reconocer hasta los 90.
De la multitud de obras que construye hoy nos fijaremos en una pequeña casa que construye para si mismo en una parcela cedida por la universidad en Harvard.
La vivienda que construyó para si mismo entre 1957 y 1958 en Cambridge, se situaba en un terreno totalmente plano, cedido por la Universidad de Harvard y muy cercano al campus, que daba a dos calles formando esquina. El proyecto se realizó durante los dos años anteriores a su edificación, mientras sus alumnos experimentaban con distintas tipologías en los barrios de Cambridge. La respuesta a este solar tiene un carácter totalmente introvertido, como si esta condición de exiliado no le dejase habitar abiertamente el nuevo entorno que le estaba tocando vivir y en cambio prefiriese hacer del patio el leit motiv del proyecto como homenaje a sus raíces mediterráneas.
Como comentaba en 1958 el propio Sert “Cuanto más escasos y más caros van siendo los terrenos en las zonas urbanas, más atención deberíamos prestar a los tipos de casa mediterránea con patio (…). Las razones son bien sencillas: colocando unas vallas prácticamente encima de los límites de la parcela se aprovecha mejor un terreno que ha pasado a ser muy valioso. Además, tanto los espacios interiores como los exteriores son más privados y tranquilos. Y por último, todas las habitaciones pueden tener vistas agradables, independientemente de lo que haya más allá de los muros.”
Todo el proyecto se vuelca al interior, como si de una domus romana o un monasterio claustral se tratase. De esta forma se da la espalda por completo a la calle, para que la vida se produzca de espaldas a su entorno.
La planta se estructura alrededor de un patio central. La llegada principal a la casa se produce por un espacio amplio y ambiguo que da a este patio, y que a su vez funciona a modo de biblioteca, con lo cual el concepto de hall o de pasillo no existe en la casa, desde aquí se puede acceder tanto a la zona de día girando a la derecha, como a la zona de noche girando a la izquierda.
Ambos ámbitos tienen exactamente la misma crujía. De esta forma queda el citado patio flanqueado por estos tres espacios y por la cocina que queda justo enfrente de la zona de entrada. Este espacio es largo y estrecho y se relaciona a su vez con una estancia del servicio. Por ello y a pesar de que físicamente la casa se puede recorrer entorno a este patio, en la práctica uno de sus lados estaba ocupado por el servicio, mientras que la familia circulaba por el resto de los espacios que se encontraban comunicados entre sí entorno a este vacío central. Así la casa se va agrupando por partes, que a la vez tienen autonomía propia como la zona de estar-comedor o el ámbito de los dormitorios y a la vez estas partes constituyen una sola unidad habitacional. A diferencia de su anterior vivienda en Locust Valley no hay una jerarquización de espacios tan acuciante, resultando el conjunto mucho mas equilibrado. A Sert le gustaba citar el ideal Albertiano “toda casa debe ser como una ciudad pequeña y toda ciudad, como una casa grande”.
Con todas estas particularidades el resultado formal hacia el exterior es de caracter un tanto seco, sin que esto le preocupase para nada a Sert. La realidad es que nos encontramos con un proyecto sin fachada principal, es más se podría decir que se trata de un proyecto sin fachadas al no disponer de prácticamente huecos en ellas. De hecho el único signo de que algo está ocurriendo en el interior de estas rígidas tapias es la aparición del garaje y del dormitorio de la hija como si de una pequeña protuberancia que desborda al exterior se tratara. Algunos críticos en este punto han querido ver reminiscencias de la casa ibicenca, donde los hornos tanto cilíndricos como cuadrados surgen en medio de los blancos muros que las definen. Aunque quizás sea querer ver demasiado.
Esta tipología poco o nada tiene que ver con los patios abiertos de las casas americanas propias de la ciudad jardín, con su típico front yarde de césped delante de la casa, que tanta repulsa causaba a Josep Lluís Sert, quien siempre recordaba el bullicio y la vida de las calles y plazas europeas. De hecho se podría decir que nos encontramos con una casa mediterránea fuera de su entorno, que parece querer hacer una síntesis entre el mundo europeo y el mundo americano. La casa tiene ciertas concesiones al clima y cultura local, como son la ausencia de aleros y unos grandes ventanales (que provocaban una excelente luminosidad) y que hubieran resultado muy problemáticos en un clima mediterráneo. A pesar de ello cabe destacar el asombro de la crítica de la época y las protestas de los vecinos del barrio por la aparente descontextualización de este tipo de arquitectura, mientras que la realidad es bien distinta, pues resulta una tipología que se adapta perfectamente a las necesidades de los Sert.
Además la familia acostumbraba a tener una vida social bastante ajetreada, y Josep Lluís en su condición de decano de la universidad le gustaba realizar elegantes fiestas y recepciones en su vivienda, con lo cual activaban todos los mecanismos de abertura de los grandes ventanales de la zona pública para que ésta quedase completamente relacionada tanto al patio central como con el patio particular de este ámbito, disponiendo el bufé en el césped de dicho patio cuando el buen tiempo lo permitía.
El propio Sert describe la casa de la siguiente manera “si cerramos nuestra parcela podemos conformar los espacios exteriores inmediatos a nuestro gusto. El posible desorden que veamos será nuestro desorden, que siempre es más fácil de tolerar. Los patios pueden tener un carácter muy variado. (…) con el mismo repertorio de espacios una casa de una sola planta es más interesante que una de dos, porque se pueden obtener vistas más largas a través de diversas estancias, ya que todas están al mismo nivel. También se garantiza mayor intimidad y los alicientes intangibles de vivir a ras de tierra, que ningún apartamento podría ofrecer.”
A este punto hay que recordar la gran admiración que nuestro protagonista sentía por la arquitectura árabe y en especial por la Alhambra de Granada. Recordado las palabras de Jaume Freixa “Sert, que admiraba la Alhambra y recordaba a menudo los espacios y las proporciones incluidas en el patio, desarrolló en el curso de su actividad como urbanista una teoría del patio que, a partir de la tipología mínima iba organizando niveles cada vez más complejos de vecindario, barrio, distrito, etc.”
Y como a toda buena casa – patio, la entrada se produce lateralmente. Como en su anterior casa de Long Island, a la sala de estar se le dota de un espacio de generosísimas dimensiones, destacando dentro de este ámbito la situación de la chimenea de ladrillo separando salón del comedor. Esta disposición se hizo habitual entre los arquitectos europeos que habían emigrado a Estados Unidos, como bien se puede apreciar en muchos proyectos de Breuer, quien también había llegado a Harbard de la mano de Gropius.
Las grandes superficies acristaladas de las ventanas hacían que la mirada se prolongase hacia los patios de la casa, a modo de “enfilades” visuales, especialmente con las vistas cruzadas que se producen en el patio central, evitando la sensación de opresión. En una de estas visuales a través de varios espacios la vista termina topando con una valla del patio decorada por un “graffitto” de Constantino Nivela. De esta forma todos y cada uno de los huecos se dispusieron de tal manera que siempre la vista pueda ir cruzando distintos ambientes tanto interiores como exteriores, pareciendo la vivienda mucho más amplia, que lo que en principio pudieran dar de si sus 165 metros cuadrados.
Todos estos mecanismos de compresión, descompresión, expansión y dilatación del espacio, Sert ya los había conocido hace treinta años cuando visitaba el Pabellón de Barcelona de Mies.
La casa está dispuesta en torno a tres patios que se enmarcan en un rectángulo de 18 x 30 m, los tres están alineados siguiendo un eje longitudinal noroeste-sureste. Uno es el delantero, otro el trasero y un tercero central y cuadrado de dimensión 7.3 x7.3 m que coincide exactamente con el doble de 12 pies, al que vuelcan la mayoría de las piezas y que genera una circulación continua al rededor de él por secuencia de piezas comunicadas.
Cada uno de estos tres patios tenía su carácter propio.
El patio central tiene un carácter más simbólico, ornamental y de acogida. Se encuentra pavimentado en parte de superficie con bloques de hormigón de 20,5 cm2 y mientras que el resto se cubre con guijarros. A su vez este espacio se encuentra rehundido veinticinco prudentes centímetros en previsión de la acumulación de la nieve del largo y frío invierno bostoniano. En este salón a cielo abierto, destaca la presencia de un gran árbol de hoja caduca, con la idea de que se fuese poniendo en evidencia el paso de las estaciones. Este árbol es un Dogwood (cornus florida), que es una variedad de un arbusto europeo que se caracteriza por sus tallos rojos muy visibles en invierno y por el color rojo de sus hojas en otoño.
Por otro lado nos encontramos el patio trasero al que dan los dormitorios que estaba pensado para el crecimiento de plantas y hierbas aromáticas, disponiendo a su vez de una zona de solarium, mientras que el patio delantero al que da la zona de día, estaba más enfocado para poder comer al aire libre (con una zona debidamente pavimentada) y ser zona de juegos de los niños. De esta forma se consigue que el espacio principal de comedor – salón de directamente a dos de los tres patios, con lo que obtiene una interesantísima doble orientación.
También destacar que tanto el patio delantero como el trasero, lindan anónimamente con la calle con una simple tapia de ladrillo por un lado y con vallas opacas de madera pintada por el otro.
La casa se construyó en muy poco tiempo, a juzgar por la fecha de los planos de licencia de la obra, 1 de julio de 1957, y la aseveración de Sert, según la cual empezó a vivir en ella a principios de 1958.
La construcción de la casa se realiza de manera sencilla y económica, con un sistema típicamente americano, a base de madera e incluso en alguna de las paredes aparece el sistema de “ballon frame”, combinado con paredes de ladrillo tipo cavity wall y forjados a base de cabios y tableros de madera.
Los muros laterales de ladrillos que limitan los jardines penetran hasta las dos paredes cortas de la sala de estar. el resto de los interiores se acaban con pintura blanca sin ningún tipo de textura.
La casa acogía una estudiada y bellísima colección de arte donde cada pieza tenía su lugar huyendo de la competencia visual entre ellas y de cualquier tipo de ostentación, apostando por la sencillez y la desnudez ornamental. Todos los elementos artísticos que se ubicaban en la casa no tenían sentido en si mismos, sino dentro de todo el conjunto y de su relación con los demás objetos y el propio espacio que los albergaba. Por citar un ejemplo, en la sala de estar se ubicaba un banco alargado adosado a la pared de mayor longitud con una dimensión de 3.39 m, que se dividía en tres segmentos iguales tapizados en negro, rojo, azul y amarillo, que serian los mismo que aparecen en el cuadro que Miró pinto ex profeso para este espacio.
Es destacable el comentario del periodista y arquitecto R. Campbell a raíz del desmantelamiento de la casa en 1982 “Uno de los más notables montajes de arte y arquitectura de América ha sido silenciosamente desmantelado en Cambridge durante las pasadas semanas. Tal vez desde que Isabella S. Gardner construyó y amueblo su casa en el Fenway, ni la pintura ni la escultura han sido nunca tan ricamente integradas en el área de Boston como lo fueron en la casa de Josep Lluís Sert, mundialmente famoso arquitecto y antiguo decano de la Harvard Graduate School od Gesign (…)
Esculturas de Alexander Calder, pinturas de Miró y Le Corbusier, un retablo gótico catalán, pinturas y una escultura pequeña de Fernand Léger, un mural de Constantino NIvolay numerosos dibujos y pequeños objetos precolombinos estaban entres los tesoros (…)”
Webgrafia:
http://www.rtve.es/alacarta/videos/imprescindibles/imprescindibles-josep-lluis-sert-sueno-nomada/2567683/
http://hyperbole.es/2017/06/josep-lluis-sert-casa-sert-cambridge-massachusets-1958/
http://www.c-bentocompany.es/152239183/1534260/posting/
http://www.stepienybarno.es/blog/2009/11/05/casa-patio-sert-en-cambridge-1958/
http://hicarquitectura.com/2017/07/josep-lluis-sert-sert-house/
Webgrafia:
http://www.rtve.es/alacarta/videos/imprescindibles/imprescindibles-josep-lluis-sert-sueno-nomada/2567683/
http://hyperbole.es/2017/06/josep-lluis-sert-casa-sert-cambridge-massachusets-1958/
http://www.c-bentocompany.es/152239183/1534260/posting/
http://www.stepienybarno.es/blog/2009/11/05/casa-patio-sert-en-cambridge-1958/
http://hicarquitectura.com/2017/07/josep-lluis-sert-sert-house/
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